Somos un grupo de amigos. Nos gusta cocinar, saborear la amistad y la buena mesa.
26 noviembre 2011
Champaña medicinal
El viejo, que sabía ser agradecido, se hubiese encariñado con ella, que alguna vez incluso tuvo que levantarse por la noche a atenderlo, pero tenía un defecto insoportable: no le perdonaba sus excesos y hacía alusión a ellos continuamente. La primera vez que como medicina había tenido que servirle una pequeña dosis de champaña, lo acompañó con la observación:
-Es de aquél que había usted comprado para ocasiones muy diferentes a ésta.
La historia del viejo y la jovencita
Italo Svevo
(L''instant Taittinger)
23 noviembre 2011
Postres maravillosos
19 noviembre 2011
Café
17 noviembre 2011
Festín de Sainte-Barbe
Aparte del conejo que venían engordando en el cobertizo desde hacía un mes, los Maheu tenían para comer una sopa sustaciosa y carne de buey. La paga de la quincena había sido precisamente la víspera. No recordaban un festín como aquél. Incluso cuando la última Sainte-Barbe, la fiesta de los mineros en la que no hacen nada durante tres días, el conejo no fue tan grande ni tan tierno. Por lo mismo los diez pares de mandíbulas, desde las de la pequeña Estelle, cuyos dientes empezaban a salir, hasta las del viejo Bonnemort en trance de perder los suyos, trabajaban con tal ahínco que hasta los huesos desaparecían.
Germinal
Émile Zola
Banquete. Pieter Brueghel)
15 noviembre 2011
Lectura y vodka
Andréi Yefímyh no lee tan aprisa ni con tanto ímpetu como lo hacía Iván Dmítrich cuando leía; por el contrario, lee con lentitud y penetración, deteniéndose a menudo en los párrafos que le gustan o que no entiende. Siempre tiene junto al libro una garrafilla de vodka, y sobre el mantel, sin plato, un pepinillo en salmuera o una manzana macerada. Cada media hora, sin levantar los ojos del libro, llena una copa de vodka, se la bebe, y sin mirar, a tientas, coge el pepinillo y muerde un trocito.
El pabellón número 6
Anton Chéjov
(Mimmo Paladino)
13 noviembre 2011
Hospitalidad
Pero en la práctica, la puerta de esa casa podía considerarse abierta, como están abiertas las puertas en los pueblos de la tierra caliente. Todo el que llamaba tenía derecho a entrar y buscarse un sitio entre los árboles del jardín, una silla en la sala junto al piano o un lugar en el comedor frente a la sopa de arroz.
Mal de amores
Ángeles Mastretta
(Bodegón con libro y tenedor. Pablo Salinas)
11 noviembre 2011
Almuerzo en el jardín
A las doce y media apareció la mucama y preguntó: "¿La señora qué va a almorzar?". Carmen pidió una ensalada de lechuga y berro. "Traémela acá", le gritó cuando la mujer ya casi entraba en la casa. La mucama volvió a los diez minutos con la bandeja. Llevaba una ensaladera de tamaño mediano con las verduras elegidas condimentadas con oliva y aceto balsámico, "como le gusta a la señora", los cubiertos, una servilleta de tela, una copa, una jarra de agua, y un plato con un churrasco "por si le viene ganas".
Las viudas de los jueves
Claudia Piñeiro
(Materia natural. Ángel Castaño)
09 noviembre 2011
Cena para tres
La primera vez que el profesor dijo "buen provecho", juntando las manos, frente a la comida que yo había preparado, fue también la primera vez que comimos juntos los tres. El contrato decía que debía preparar la cena a las seis y marcharme a las siete después de retirar la mesa y fregar los platos; sin embargo, el profesor se opuso a aquel horario tan pronto como mi hijo se unió a nosotros.
La fórmula preferida del profesor
Yoko OGawa
(L'anna i temps. Jaume Carbonell)
06 noviembre 2011
Zumo de pomelo y uva
04 noviembre 2011
Pepino
Se acordó de cuando había ido al río a buscar agua y el mudo había introducido un pepino en su cubo, sonriéndole, como un zorro astuto, pero sin intenciones malignas, y a ella le había dado un vuelco el corazón por primera vez en su vida. Se había puesto roja como un tomate y había agachado la cabeza, clavando la mirada en la brillante superficie del agua y contemplando el reflejo de su rostro sonrojado. Más tarde, se había comido el pepino, y su sabor se le había quedado grabado durante mucho tiempo.
Grandes pechos amplias caderas
Mo Yan
02 noviembre 2011
Budin de Yorkshire
01 noviembre 2011
Chocolate con avellanas
Por la tarde estaba comiendo chocolate. Me gusta mucho el chocolate, sin duda es lo único que tengo en común con mamá y con mi hermana. Al morder una barrita de chocolate con avellanas, noté que se me partía un diente.
La elegancia del erizo
La elegancia del erizo
Muriel Barbey
(Chocolat-Delespaul-Havez)
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